De turismo por Castilla: Segovia y el festival Titirimundi

Si algo tiene bueno vivir en la zona de Valladolid es que está cerca de muchísimos sitios, esto implica que en un radio de una hora u hora y media de coche te puedes plantar en sitios tan geniales como Madrid, León, Burgos, Ávila y un sin fin más de ciudades.

Aprovechando la racha de buen tiempo y  que se celebraba la XXIX Edición del Festival Titirimundi, pensamos que nuestro destino no podía ser otro que Segovia... Además, creo que no podía existir un lugar mejor para ir con niños. Que satisfacción ver la cara de La Tremenda cada vez que veíamos un espectáculo de títeres o de clown.

 

Turismo lo que se dice turismo hemos hecho poco, a parte del Acueducto, el Palacio de la Diputación, la Catedral  y el Palacio de Quintanar no hemos visto mucho más... ya que nuestro principal objetivo era ver los espectáculos del Titirimundi. Aunque la tradicional foto con el acueducto de fondo no podía faltar...

Titirimundi promueve el teatro de títeres como una rama artística tradicional, pero que se ha sabido adaptar a los nuevos tiempos. Su primera edición se llevó a cabo en 1985 y desde entonces se ha seguido llevando a cabo en la ciudad de Segovia. Que durante una semana se convierte en un gran escenario, y esto es literal, ya que las actuaciones no se llevan a cabo en los teatros tradicionales, sino en escenarios tan particulares como: el patio del Palacio de Quintanar, el Palacio de la diputación, la Plaza Mayor, el Museo Esteban Vicente y un sin fin de calles.

Había multitud de espectáculos, pero nosotros nos centramos en aquellos destinados para un público infantil, de entre los que destaco el Coro Cocó de la Compañía PAI. Si tenéis la oportunidad de verlo en alguna otra ciudad no lo dudéis, merece muchísimo la pena y los niños lo pasan genial. 

MamáRunner: Semana 1

Desde que nacieron Los Mellis he notado que mis niveles de estrés han aumentado notablemente. En un primer momento pensé que esto era lo normal, tener mellizos y una niña de dos años no es tarea fácil. Pero parándome a pensar bien en la situación me di cuenta que me agobiaban más "otras cosas". Entre estas "otras cosas" hay una que me amarga y es el estar en casa, creo que no he nacido para ser ama de casa.

No quiero que esto se entienda mal o se piense que lo digo de forma despectiva, porque es justo lo contrario. No hay trabajo más duro y menos gratificante que el ser ama de casa. A mi personalmente lo que más me agobia es que nunca se termina nada: acabas de hacer el desayuno y ya tienes que pensar en la comida, limpias el polvo y a la media hora hay otra vez, ordenas y tus hijos no tardan ni cinco minutos en desordenar... Es un poco frustrante, sin embargo cuando uno trabaja acaba las cosas y listo, y si el trabajo es más monótono o tedioso por lo menos está el consuelo de que tras ocho horas te piras, ¿Pero cuando acaba el trabajo de las amas de casa?, y ya no hablemos de que a final de mes no hay ningún ingreso en tu cuenta bancaria...

Bueno dejemos el tema que me pongo nerviosa, y justo con el fin de eliminar esos nervios y el estrés acumulado (y de paso quitarme algún kilillo de encima) hace unos días empecé a caminar. La rutina es llevar a La Tremenda a la guardería, y de ahí seguir con los mellis y caminar durante una hora u hora y media.

Hoy, al igual que el resto de días, he seguido mi plan. Pero a mitad de camino sentí una necesidad imperiosa de correr, fue como si algo por dentro me dijera que tenía que hacerlo y sin pensarlo mucho empecé a correr... Según la aplicación del móvil fueron algo menos de 3 minutos seguidos de carrera. La sensación fue agradable y liberadora, al parar pensaba que el corazón se me salía del pecho (estoy en baja forma), pero pensé ¿Por qué no?. Cierto es que nunca he sido una gran deportista, pero bueno todo será cuestión de tener paciencia y echarle ganas.

Así que a partir de hoy empiezo el proyecto #MamáRunner. Para asesorarme he acudido a internet, y he descubierto una web de lo más interesante: empezaracorrer.com, hay muchísimos consejos y tablas de iniciación.

Cada semana iré publicando como lo llevo y la rutina que estoy siguiendo.

• Rutina semana 1:
• Caminar 13 min
• Correr 2 min
• Caminar 13 min
• Correr 2 min
• Caminar 13 min
• Correr 2
•  Caminar 15 min

Se despide por hoy #MamáRunner 

Cuelga horquillas

Tener una niña es sinónimo de tener una caja llena de pinzas y trabas, y ¡más si la niña tiene una melena pantene! Así que, esta semana me he puesto las pilas y le he hecho a la tremenda un cuelga horquillas como el que podéis ver en la foto. 

Llevaba tiempo viendo diseños de nubes con carita y me gustaban bastante. Pero no me animaba a hacer un simple cojín con esa forma, me apetecía que tuviera alguna otra utilidad a parte de la decorativa. Y pensando, pensando... se me ocurrió que si le añadíamos unos lazos podría valer para colgar las pinzas de la tremenda. Y de paso me desharía de esa cajita de plástico, tan antiestética, que usaba hasta ahora. 

El bordado de la cara lo hice con hilo de punto de cruz. El resultado no es que sea fantástico, pero estoy bastante orgullosa, ya que es la primera vez que bordo algo en tela "normal" (que no sea de punto de cruz).

Los lazos son de raso de un grosor de 2 centímetros. Estuve tentada por ponerlos más estrechos, pero creo que si lo hubiera hecho así, las horquillas no habrían aguanado y se caerían. 

Espero que os guste :)

Blogger Planner

 

Seguro que si habéis seguido el blog en esta primera semana de vida, habréis visto que soy toda una novata en el tema. Pero bueno, poco a poco la cosa va saliendo... le he dado un formato más mono (aún le falta mucho), he comenzado a hacer pequeñas modificaciones en los códigos HTML (quién me lo iba a decir a mí... si soy de letras), me estoy poniendo las pilas con las fotografías y empezando a mirar cosillas sobre como conseguir un mejor posicionamiento. 

Pero todas estas cosas no tendrían sentido si no existieran contenidos para el blog. Escribir se puede escribir de cualquier cosa, pero tampoco me gustaría que fuera un diario personal donde exponer mis pensamientos. Es por eso que esta semana me he marcado como objetivo definir que temas me gustaría tratar en el blog y hacer una programación mensual de lo que quiero postear. 

Y buscando información sobre como organizarme, he descubierto a Miss Lavanda y su fantástico Blogger Planner. Así que la entrada de hoy se la dedico a ella y a su blog. No sólo por el blogger planner, sino que también porque tiene muchísimos tutoriales sobre como mejorar un blog, cursos gratuitos sobre aprender a usar photoshop y consejos sobre diseño. 

Os dejo algunas fotos del blogger Planner impreso. Aparte del diseño gráfico (chulísimo), tiene secciones tan útiles como los objetivos anuales o los calendarios mensuales.

 

De turismos por Castilla: Tordesillas

Desde que nos mudamos a Valladolid no hemos tenido muchas oportunidades de conocer la zona, básicamente porque llegue embarazada de casi siete meses, de mellizos y con una niña de menos de dos años. Así que, cuando llegaban los fines de semana, de lo único que tenía ganas era de que el Padre de las Criaturas se encargara de la Tremenda y yo descansar un poco.

Cuando nacieron los mellis era finales de enero, y la tremenda ya tenía dos años y un mes, pero el tiempo no acompañaba en exceso... Sin embargo, ahora que los mellis ya tienen tres meses y el buen tiempo parece que se ha instalado en nuestras vidas hemos decidido ponernos en marcha. Así que, a partir de ahora los sábados toca ir "De turismo por Castilla" y los domingos bloguearlo. Esta semana hemos decidido no alejarnos mucho del pueblo donde vivimos (Medina del Campo) y nos hemos ido a pasar el día los cinco a Tordesillas.

Tordesillas pertenece a la provincia de Valladolid, yo diría que no es un pueblo excesivamente grande, cuenta con unos 9.000 habitantes y es conocido por el famoso Tratado de Tordesillas, aunque últimamente también por el polémico toro de la Vega.

Entramos al pueblo por el puente medieval, en su día contaba con un castillo de defensa pero hoy en día no se conserva ningún resto del mismo. De ahí nos dirigimos a la zona centro, donde pudimos aparcar sin problema alguno. 

No sé si porque en esta época del año no hay mucho turismo, o porque el pueblo es pequeño, pero nos resultó muy tranquilo y cómodo para movernos con una niña de algo más de dos año y un carrito gemelar.

La tremenda se apuntó a la moda de ir empujando un carrito, así que se llevo a su muñeca Marisol para que le diera el aire.

Calle Santa María

Seguimos por la calle de Santa María, dejando a la izquierda la Iglesia que lleva el mismo nombre. Esta calle desemboca en la Plaza Mayor, pero antes de llegar a ella nos encontramos con la Bodega Muelas. Es un sello bastante joven y con una producción limitada, pero esto asegura un mayor control en el proceso de elaboración de sus vinos. Aunque lo que más me impactó es que las bodegas están justo debajo de la calle Santa María. 

Bodega Muelas

Por fin llegamos a la plaza mayor, data del siglo XVII, en ella desembocan cuatro calles y está llena de pórticos, debajo hay mayoritariamente bares. Esto es algo que me está sorprendiendo gratamente de Castilla, que la gente a pesar de que el tiempo es duro no deja de disfrutar de la calle y de las terrazas.

Plaza Mayor

Hoy hacía un día realmente caluroso, así que aprovechamos para hacer una parada y tomarnos el aperitivo. Caña y tostas típicas de la zona: tosta de Juana la Loca y tosta de Felipe el Hermoso, ¿adivináis cuál es cuál?. Por cierto, si os interesa la receta de alguna de ella sólo comentarlo, el chaval del bar era superamable y me explicó como hacerlas. 

Tostas Felipe el Hermoso y Juana la Loca

Tras reponer fuerzas continuamos la ruta por la calle de San Antolín. Nos cruzamos con el Palacio Fortificado de los Aderete, que antiguamente contaba con un pasadizo que comunicaba con la iglesia de San Antolín. Por lo visto, fue usado por Juana la Loca para evitar mezclarse con el pueblo llano cuando iba a misa. 

Calle San Antolín

Palacio Fortificado de Los Aderete

Seguimos bajando por la calle San Antolín y llegamos al final de nuestra ruta, para ver la Iglesia de San Antolín y las Casas del Tratado. En estas últimas se encuentra la Oficina de Turismo y el Museo de Tratado, en el que se explica la historia de como los Reyes Católicos y el Rey Juan II de Portugal pactaron, el 07 de Junio de 1494, la división de las zonas de navegación y conquista del Océano Atlántico y del Nuevo Mundo para evitar conflictos entre ambos reinos.

Iglesia de San Antolín

Balcón Casas del Tratado

Casas del Tratado

Y ya que estábamos en una zona tan bonita, y con tan buena luz, aprovechamos para inmortalizar el momento en familia. Os dejo algunas fotos para que las veáis, espero que os gusten. 

La Tremenda

El Padre de las Criaturas con el Santo y la Favorita

La Madre de las Criaturas y el Santo

Cosas que me gustan de ir a dormir

Muchos de los que leéis el blog me conocéis en persona, y sabéis los problemas que tengo con "la tremenda" (también conocida como mi hija mayor) y el sueño.

Siempre ha dormido mas o menos bien, pero desde que nos trasladamos a vivir a Valladolid la cosa empeoró algo, y desde que nacieron los mellis empeoró mucho... Hemos llegado a pasar noches enteras levantándonos cada media hora porque se despierta gritando y nos toca calmarla y estar un rato con ella en su habitación.

Existen teorías miles sobre como solucionar este problema, yo en mi caso he intentado varias: le hemos marcado una rutina, la hemos pasado de la cuna a la cama, a partir de las 20h intentamos que las actividades sean relajantes, le damos cenas ligeras, recurrimos a los recuerdos positivos antes de ir a dormir para evitar las pesadillas e incluso administrarle unas gotas que la relajan y que nos mandó la pediatra (se las di 3 días porque no le hicieron nada).

A la tremenda le encantan los libros, igual que a mí, y uniendo eso con los problemas de sueño, se me ocurrió que una buena opción podría ser el comprarle algún libro que hablara sobre el momento de irse a la cama y lo divertido que puede ser.

Así que con este pensamiento me he plantado en la librería, junto con los mellis y mi amiga Isa, y he comprado el libro "Cosas que me gustan de ir a dormir".

Está escrito por Trace Moroney, autora e ilustradora de éxito internacional, que ha vendido más de tres millones de sus libros traducidos a quince idiomas. En España la comercialización de la colección "Cosas que me gustan de..." la realiza la editorial SM. Otros títulos que podéis encontrar so: "Cosas que me gustan de mis abuelos", "Cosas que me gustan de mi familia", "Cosas que me gustan de mis amigos", "Cosas que me gustan de mis mascotas", "Cosas que me gustan de mí", "Cosas que me gustan de Jugar" y "Cosas que me gusta de el colegio".

Como podéis ver en esta foto, las ilustraciones son muy bonitas y el texto es bastante sencillo para la edad de mi hija, mensajes muy claros y bonitos que se asimilan bastante a la rutina que cualquier padre inculca a su hijo para prepararse para ir a dormir: cepillarse los dientes, ponerse el pijama, recordar las cosas divertidas que hemos hecho durante el día, leer un cuento, dar las buenas noches a papá y mamá... 

"La tremenda" por ahora lo ha cogido con ganas, esperemos que le ayude a mejorar en lo que a sueño se refiere. Os iré informando.

Por cierto, otra cosa que hemos empezado a poner en prácticas es que si se despierta a media noche, sea el padre el que acuda al rescate. Hoy ha sido el segundo día y parece que lo lleva bien, pero la que lo lleva realmente bien soy yo... hoy a las cuatro de la mañana, cuando he acabado de darle el bibi "al santo" (nuestro melli chico, Óscar) he mirado la cama y he visto un paraíso de 1,60m x 2,00m, y he pensado "que demonios, no duermas en tu lado, hazlo en la mitad y a pierna suelta" y así ha sido hasta las 6 de la mañana que se ha despertado "la favorita" (nuestra melli chica, Alba). ¡Han sido 2 horas, pero me han sabido a 8!

Mañana más.

Pollo a la Forestière

Por fin se acerca el fin de semana, ya estamos a jueves y antes que nos queramos dar cuenta se nos habrá pasado otra semana más. No sé si os sucederá, pero a mi últimamente se me van los días volando, y me da algo de rabia porque me gustaría poder tener más tiempo para hacer aquellas cosas que me gustan, como por ejemplo cocinar.

No es que sea una gran cocinera, pero sí que me gustaría que el blog tuviera un pequeño espacio donde exponer aquellas recetas que suelo hacer, trucos de cocina o simplemente pensamientos culinarios. Eso sí, muy del día a día, porque si lo que buscáis es una recomendación de un buen vino mal vamos, no soy para nada de exquisiteses, ni de complicarme mucho la vida... Es mas, desde hace un par de años la Thermomix es mi gran aliada.

Hoy os traigo una receta francesa: Pollo a la forestière". La saque del blog "Thermomix por el mundo", el cual os recomiendo. Está dedicado a recetas internacionales, muchas de ellas muy sencillas de hacer, como esta, y fácilmente adaptables a la cocina tradicional si no tenéis Thermomix.

Como la receta es un poco contundente, lleva nata y mantequilla, hice de guarnición unas patatas mini al vapor.

Ingredientes para elaborar la carne:
- 2 pechugas de pollo
- 25grs de harina
- Sal
- Pimienta molida
- 30 grs de aceite de oliva

Ingredientes para elaborar la salsa: 
- 150 grs de cebolla o cebolleta
- 3 dientes de ajo
- 25grs de mantequilla
- 200grs de champiñones laminados
- 100grs de vino blanco
- 50grs de agua
- Sal
- Pimienta recien molida
- 100grs de nata para cocinar
- Perejil picado (opcional, yo no se lo puse)

Elaboración: 
Cortar las pechugas de pollo en tiras y sazonar con la sal y la pimienta. Enharinar y saltear a fuego vivo, en una sartén con aceite de oliva. Una vez hecho este paso, reservar.

Introduce en la Thermomix la cebolla y los ajos, y pica durante 4 segundos a velocidad 4. Baja los restos que puedan quedar en las paredes y añade la mantequilla. Programa 8 minutos a temperatura varoma, velocidad cuchara.

Una vez acabado el proceso anterior, añadir los champiñones (pueden ser de lata, aunque yo los puse frescos) y cocinar 5 minutos a 100º, velocidad cuchara. Por último, añadir la carne que teníamos reservada, junto con la nata y el perejil picado. Programando 2 minutos, temperatura varoma, velocidad cuchara, giro a la izquierda (la receta original no indica que haya que ponerlo con giro a la izquierda, pero en más de una ocasión he tenido problemas con el pollo que acaba deshecho, así que por precaución yo lo programé de esta forma).

La salsa para mi gusto quedó bastante liguera, así que añadí otros 3 minutos a temperatura varoma, velocidad cuchara y giro a la izquierda.

Estuche de lapices tamaño mini

La vida sigue más allá de la maternidad, y no es cuestión de quedarnos en casa y renunciar a esa cervecita fresquita acompañada de cacahuetes, o a ese pincho de tortilla con una buena coca cola helada... Llega el buen tiempo (en Valladolid el medio buen tiempo) y con él las ganas de terracear* (*dícese de ir a pasar la mañana, la tarde o la noche en una terraza a tomar algo y disfrutar del buen tiempo). Aunque esto puede convertirse en algo realmente estresante si vas con niños.

Pero existe una forma de evitar que lo que parece una experiencia de lo más placentera se convierta en una pesadilla, elegir una terraza donde haya una gran plaza. ¡Sí, una plaza!, ese lugar donde los padres modernos soltamos a nuestros hijos para que se desahoguen: corran, griten y jueguen un rato mientras nosotros terraceamos.

Aunque no siempre es posible conseguir una terraza que cumpla con este requisito básico, y para esos días hay que buscar una alternativa de entretenimiento (y que sea tranquila, que sino la gente empieza a mirarte muy mal). Y mi alternativa para esos días es una libreta y unos lápices de colores... eso si, con su estuche mono y hand made. 

En esta primera foto podéis ver que el tamaño es reducido, aproximadamente unos 20cm *15cm. Lo cual lo hace ideal para llevarlo siempre en el bolso y sacarte de más de un aprieto... Desde que lo hice mi hija mayor (alias "la tremenda") lo ha usado muchísimo, tanto en la terraza de algún bar, como en la sala de espera del médico o en el último viaje que hicimos con ella en avión.

 

Como veis tiene dos compartimentos, uno destinado a los lápices de colores o ceras (se pueden poner también rotuladores, pero la ecuación "mi hija + rotu = desastre", así que evito que se acerque a ellos) y otro para poner una pequeña libreta o papeles. Le añadí también un asa, que le hace especialmente gracia a "la tremenda", ya que cuando lo cierra dice que tiene un bolso. 

Cerrado queda muy gracioso, aunque reconozco que parte del mérito es de la tela, que sin duda alguna es muy animada para un estuche así.

¿Quién soy yo?

Yurena, más conocida como Yure. Canaria de nacimiento, vallisolitana por diez meses y catalana de adopcion. Como veréis me adapto a cualquier terreno y clima, bien sea el tropical de las islas bonitas, el mediterraneo de mi catalunya del alma o el frío de la meseta central. 

Mujer, trabajadora, esposa, madre, costurera aficionada, cocinera doméstica, ama de casa desastrosa, amante, amiga y mil cosas más, igual que otras muchas mujeres. 

De todo eso hay algo que me enorgullece más que nada, y es el ser MADRE. Madre de tres criaturas, sí lo has leído bien, ¡tres! (quería dos, pero a última hora se coló uno más y linea y bingo para la señorita... que alguien le de unos mellizos a la morena del fondo). Así que me veo rodeada de tres criaturas peleonas, pañales, biberones, olor a leche cortada, rabietas y noches largas (muy largas). Pero también de risas y sonrisas que compensan con creces los malos ratos.

Y en todo este viaje, lleno de nuevas experiencias, tengo la compañía de "el padre de las criaturas". Ese hombre que me saca de quicio pero también me tranquiliza y me ayuda a entender que ser madre no significa sacrificar mi vida, sino disfrutar de mis hijos y de aquellas cosas que me gustan, como la costura, la cocina o los amigos. Así que gracias en parte a él, me he decidido a montar este pequeño diario de a bordo, donde mostrar esa faceta creativa (costura, pintura, cocina, escritura, fotografía...) que siempre he tenido y que he explotado sólo de puertas hacia dentro. 

Así que comienza la cuenta atrás: ¡tres, dos, uno, despegue!